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Biodanza los 7 poderes

El éxito pedagógico y terapéutico de Biodanza se debe a sus efectos sobre el organismo como totalidad y a su poder de rehabilitación existencial. Biodanza consta de 7 poderes relacionados en un conjunto coherente. Cada uno de ellos tiene, por sí mismo, un efecto transformador:

 

(1) Música

 

 

Biodanza usa música como el lenguaje universal que es accesible para todas las personas en cada lugar y tiempo. La música entra directamente a las emociones sin intervención de nuestros pensamientos. Cada tono tiene el todo en sí mismo; una cualidad profunda y conectada que no se puede medir con ningún instrumento.

 

Con Biodanza no aprendemos a estudiar la semántica de la música, pero escuchamos el alma, la emoción, que comunica con nuestro inconsciente. Nuestra capacidad de escuchar es más importante para aprender este lenguaje universal que nuestra capacidad cognitiva.

Biodanza se expresa en la danza integradora. El movimiento es la manera más original y primitiva para expresar la vida. Todo, hasta la parte más pequeña del universo, se mueve.

 

Con Biodanza estimulamos el movimiento integrado: la danza o el movimiento en que nos sentimos auténticos, puros y completos. El movimiento en que movemos todo nuestro cuerpo. El movimiento se originó a través de nuestros sentimientos.

(2) Danza integradora

(3) Vivencia

 

 

Con Biodanza experimentamos la vivencia del "aquí y ahora", con gran intensidad y entrega. Una experiencia que causa efectos emocionales, sensoriales e internos. No hacemos teatro, no es una exhibición, somos la divinidad, el ángel, la madre, el bebé, el amante. La danza nos invita a expresar lo mejor de nosotros mismos.

 

La vivencia es la puerta para entrar al espacio puro del ser, en donde el tiempo lineal no existe. Con la vivencia nos transformamos corporalmente (p.e. defensas y presión sanguínea) y existencialmente (crecimiento motórico-afectivo, autoconfianza, etc.).

La caricia es una expresión afectiva. En Biodanza, la caricia es una cualidad poderosa si se manifiesta como caricia desde el corazón, desde el alma. La caricia es una expresión de reconocimiento íntimo y valoración de la persona en su totalidad. En la caricia experimentamos un balance entre dar y recibir la afectividad. En un nivel profundo la caricia tiene la inteligencia para que te abras y te entregues.

 

Rolando Toro, el fundador de Biodanza, dijo: “Alguien que no ha acariciado, comienza a morir”. Según él, hay solamente una revolución significativa que es que toda la gente tenga acceso a la acaricia desde los niños hasta los abuelos.

(4) Caricia

 

 

 

 

 

(5) Grupo

 

 

 

El grupo de Biodanza es la poesía del encuentro humano y la conexión afectiva. Sentimos que formamos parte del grupo como una familia, una red afectiva. El grupo de Biodanza es diferente a otros grupos. No es un grupo en el que hablamos, no es una estructura donde damos opiniones ni pseudo críticas positivas.

 

Con Biodanza formamos parte de un grupo que es optimista, sonriente y cariñoso. El grupo es muy importante en nuestro proceso de transformación, porque realizamos nuevas formas de comunicación y conexión de los sentimientos. El grupo es la matriz para el renacimiento, donde cada participante encuentra la seguridad afectiva para su proceso de transformación.

El trance de Biodanza es un trance integrador: la percepción de nuestros límites corporales, el miedo y la vigilancia desaparecen. Nos sentimos regenerados, renacidos, experimentamos una armonía profunda, con la que nuestra percepción y consciencia se extienden. En el trance de Biodanza regresas al origen. Nos repone de lo que fue doloroso en el inicio de nuestra vida.

 

También el trance causa nuestra renovación orgánica y celular. Así por medio de Biodanza nos rejuvenecemos, porque la regresión suave es parte de cada vivencia de Biodanza. La regresión de Biodanza da una vivencia de renacer en un nido afectivo, en un entorno de seguridad y cariño.

(6) Trance

 

 

(7) Consciencia ampliada

La danza y el movimiento en Biodanza nos conectan profundamente con el ser humano y con el universo, en un estado de consciencia ampliada. Así aumenta nuestra percepción de lo más esencial. Crecemos en la admiración de la vida, el amor sin fin, la confianza, la comprensión y la consideración.

 

En los ejercicios estimulamos nuestra capacidad natural para conectarnos con todo lo que está vivo. Conectando con nuestra esencia, dejamos nuestra consciencia en "la matriz" del universo. El espacio que nos ayuda a ver, a aprender y a amar lo más profundo del otro y de la vida.

   

Biodanza es un sistema que evoluciona. Hablamos ahora sobre la identidad del profesor/a como octavo poder.